La ciencia de la complejidad ofrece un marco que permite enfrentar retos para la gestión de paisajes a través de la identificación de los atributos de los sistemas socio-ecológicos que conforman el paisaje.
Los paisajes regionales podrían definirse como sistemas socioambientales concatenados que se desarrollan bajo múltiples niveles jerárquicos en un continuo de escalas espaciales y temporales cuyo manejo impone varios retos. Los principales retos de manejo apuntan a la necesidad de identificar los elementos que conforman el paisaje y sus interacciones para desarrollar herramientas que faciliten la toma de decisiones.
La ciencia de la complejidad (Complex Science – CS) ofrece un marco que permite enfrentar retos para la gestión de paisajes a través de la identificación de los atributos de los sistemas socio-ecológicos que conforman el paisaje. Puede dar soporte a la formulación de acciones que permiten lidiar con los retos de los atributos del paisaje. El marco que ofrece CS permite identificar componentes del sistema que interactúan, o estructuras y dinámicas que colectivamente conforman sus componentes.
Los atributos que reconoce la ciencia de la complejidad en los paisajes son: (1) enlaces cruzados; (2) propiedades emergentes; (3) dinámicas no lineales; (4) memoria; e (5) incertidumbre.
ATRIBUTOS
- Enlaces cruzados: Estructuras jerárquicas de componentes humanos y biofísicos conectados bajo múltiples escalas. Este atributo se basa en que “los paisajes están compuestos por sistemas formados por sistemas”.
- Propiedades emergentes: patrones inesperados y procesos que surgen a nivel de sistemas. Resultado agregado de interacciones locales entre los componentes de los sistemas. Eventos que se desarrollen a escala local podrían tener consecuencias sistémicas amplias. Interacciones locales pueden gatillar patrones emergentes o procesos a escala mayor que afecten el comportamiento de entidades en nivel inferior, creando y reforzando el ciclo.
- Dinámicas no lineales: Los paisajes están sujetos a cambios continuos. Son sistemas dinámicos que cambian por la interacción de agentes internos y externos. El cambio puede ser continuo, gradual o estar dado por episodios de cambio rápido.
- Memoria: El estado actual del paisaje es una función de su historia. Una forma de legados históricos que persisten en la estructura de los sistemas y su funcionamiento. El uso histórico del suelo a través de prácticas e intervenciones usualmente tienen un efecto de legado en el sistema. Entender la historia del paisaje es clave para entender como alcanzó su estado actual con el fin de informar decisiones futuras de manejo.
- Incertidumbre: No se puede predecir el estado futuro del paisaje con precisión debido a que no hay dinámicas lineales, retroalimentación entre entidades en diferentes niveles jerárquicos ni entidades emergentes en paisajes regionales. Por ejemplo, si bien el clima es muchas veces estadísticamente predecible, no se lo puede predecir a detalle bajo estimaciones temporales cortas, como es el caso de las condiciones meteorológicas. Lo que podemos obtener es un rango posible de estimados de condiciones climáticas futuras.
RESTOS EN EL MANEJO
- Implementación de políticas que optimicen el uso del suelo para cumplir con objetivos regionales que permitan mantener servicios ecosistémicos que garanticen el bienestar y desarrollo de los modos de vida de sus habitantes.
- Generación de herramientas basadas en la aplicación de estrategias direccionadas a la optimización en el uso del suelo balanceando la conservación de la biodiversidad y el desarrollo socioeconómico dada su potencial naturaleza antagónica.
- Reconocimiento de la naturaleza multiescalar de los impactos humanos en el ambiente y sus potenciales impactos futuros.
Nota: Para obtener detalles adicionales sobre este estudio, y referencias a otros estudios, por favor referirse a la publicación original.